Ultima entrega del análisis de los equipos de Super Rugby. Todo a punto.
Bulls
Daniel Adongo, Bjorn Basson, Arno Botha, Lionel Cronjé, Rossouw De Klerk,JJ Engelbrecht, Louis Fouché, Dean Greyling, Francois Hougaard, Zane Kirchner,Frik Kirsten, Juandré Kruger, Werner Kruger, Mtunzi Mabeta, Bongi Mbonambi,Akona Ndungane, Wynand Olivier, Dewald Potgieter, Jacques Potgieter, Chiliboy Ralepelle,Johann Sadie, Ruan Snyman, Pierre Spies, CJ Stander, Wilhelm Steenkamp,Deon Stegmann, Dawie Steyn, Morné Steyn, Flip Van der Merwe, Gerrit-Jan Van Velze,Francois Venter, Jano Vermaak, Jurgen Visser, Willie Wepener
Empieza el primer año de la era post-Matfield. Van der Merwe y Juandre Kruger tendrán la difícil tarea de hacer olvidar la que posiblemente ha sido la mejor pareja de segundas líneas que ha tenido Sudáfrica y una de las mejores de la historia. Además, ni du Preez, ni Gary Botha, ni Steenkamp, ni van der Heever, ni Roussouw ni Kuun continúan; así que la calidad y experiencia que pierden los Bulls es más que considerable.
Corre en círculos de Pretoria la convicción de que el relevo generacional no va a ser tan duro como sobre el papel podría parecer, porque se han estado preparando para este momento desde hace mucho. Y ciertamente, el equipo ha dejado buenas sensaciones durante la pretemporada. Mejores que los Stormers, sin ir más lejos. Pero en una temporada de 16 partidos es difícil ver a estos Bulls en la primera posición de la difícil conferencia Sudafricana en el año en que posiblemente cada victoria que Cheetahs o Lions puedan conseguir será un alivio cara a no quedar fuera de la temporada 2013.
Aun a pesar de todas las bajas, el front-five de los Bulls debería ser la piedra angular de su juego. A partir de una plataforma sólida, Pierre Spies y Hougaard deberían ser capaces de lanzar al equipo en ataque. Con Sadie y Olivier en los centros y Bjorn Basson en el ala, Morné Steyn podrá escoger kick&chase o dejar que dos de los atacantes más dotados de Sudáfrica puedan jugar un rugby más expansivo. En defensa, sin embargo, Sadie y Olivier no parecen la mejor combinación y es posible que algún que otro placaje se les escape.
En la tercera Jacques Potgieter debería robarle el puesto a Dewald Potgieter y Deon Stegmann, fácilmente el hombre más odiado de Sudáfrica por su tendencia a conceder penalties, deberá apañárselas ahora que Kuun se ha ido. Pierre Spies, inconmensurable con posesión de calidad deberá demostrar algo más que lo que demostró el año pasado, máxime que ahora es capitán.
En resumen, temporada difícil para estos Bulls en reconstrucción, que más por oficio que por experiencia, irán sacando sus partidos adelante pero es difícil imaginárselos por delante de Stormers o Sharks.
Brumbies
Fotu Auelua, Ben Alexander, Sam Carter, Tom Cox, Robbie Coleman, Ben Hand, Cam Crawford, Ruaidhri Murphy, Michael Hooper, Peter Kimlin, Christian Lealiifano, Pat McCabe, Stephen Moore, Dan Palmer, Jono Owen, Siliva Siliva, Ben Mowen, Jesse Mogg, Andrew Smith, Henry Speight, Matt Toomua, Ita Vaea, Ian Prior, Joseph Tomane, Kimami Sitauti, Tevita Kuridrani, Anthony Hegarty, Leon Power, Dylan Sigg, Scott Sio, Zack Holmes, Scott Fardy, Colby Faingaa, Nic White, Jerry Yanuyanutawa.
Éxodo masivo de Wallabies el año que llega el flamante Jake White. Elsom, Giteau y Ashley-Cooper son tres duros golpes que cualquier equipo debería notar. En su lugar, ningún fichaje estelar (aparte del propio White), lo cuál deja a los Brumbies en una situación similar a la de los Hurricanes: Entrenador nuevo y renovación al canto. No es un mal momento para empezar en un equipo.
¿Quiénes serán los jefes del cotarro? Pues aparte del entrenador que ha ganado una Copa del Mundo, en el terreno de juego los galones los pondrán los pocos iternacionales que quedan: Stephen Moore, Ben Alexander y en los 3/4 el joven Pat MacCabe.
Los medios australianos no están muy de acuerdo con Jake White. Por mucha idea que se haga de que en Australia se quiere jugar diferente de como se juega en Sudáfrica, comentarios como “a pesar de que en el rugby moderno hay que atacar, también es importante saber cuándo jugar por el territorio” escuecen mucho y no auguran el rugby que hizo famosos a aquellos Brumbies de Gregan, Larkham y Mortlock.
De momento el equipo en pretemporada ya nos ha demostrado su predisposición a anotar penalty tras penalty para poner al adversario en una posición incómoda y que cometa errores, cosa que es muy del estilo del rugby africano.
Sin Ma’afu, los Brumbies pierden potencia en la primera línea, mientras que sus locks son una incógnita. Ben Mowen y el menor de los Fainga’a deberán encontrar la manera de hacer que su equipo avance y tenga continuidad. El paquete de delantera es muy joven y eso puede ser muy bueno o muy malo, pero con Jake White al mando, seguro que encuentra la manera de sacarle provecho.
Detrás se echará de menos a Phibbs y a Giteau, pero tanto Lealiifano como Toomua pueden dirigir al equipo desde el 10. Hacer buenos a los 3/4 no será el problema, el asunto será lanzar el equipo hacia adelante para que los Coleman, Speight y McCabe puedan anotar ensayos.
Reds
James Horwill, Quade Cooper, Ben Daley, Rod Davies, Anthony Faingaa, Saia Faingaa, Will Genia, Liam Gill, James Hanson, Michael Harris, Scott Higginbotham, Greg Holmes, Jono Lance, Van Humphries, Peter Hynes, Digby Ioane, Ben Lucas, Luke Morahan, Eddie Quirk, Radike Samo, Jake Schatz, Guy Shepherdson, Dom Shipperley, Rob Simmons, Aidan Toua, Beau Robinson, Chris Feauai-Sautia, James Slipper, Ben Tapuai, David McDuling, Adam Wallace-Harrison
MackEnzie ha dicho que no se quiere ir de los Reds hasta no haber dejado un “legado”. Sería todo mucho menos cómico si, primero, John O’Neill no hubiese anunciado que Robbie Deans (quien actualmente ocupa el único puesto por el que Ewen dejaría de ser entrenador de los Reds) seguirá hasta 2013, y segundo, explicase por qué no dejó dicho legado en su etapa en los Waratahs.
Pero al César lo que es del César, con MackEnzie, un equipo que hace dos años era una perita en dulce es el actual campeón, y eso no es sólo mérito de la innegable calidad de sus jugadores. Intentar repetir el éxito del año pasado va a ser muy difícil, máxime con las ganas que todos los equipos (Crusaders?) les van a tener.
La clave de los Reds está en un juego muy equilibrado, sin ninguna debilidad obvia, con un tight five muy duro, con una tercera en la que Beau Robinson manda y dirige y con una línea de vértigo en la que todos son peligrosos pero en la que Will Genia es el general y Quade Cooper, el artista. Se comenta que la lesión de Cooper puede hacer mella a los Reds, pero calidad tienen más que de sobra para suplirle, y hay que decir que el trabajo de Cooper depende totalmente de sus delanteros (de ahí los problemas de Cooper en los Wallabies).
Cuando den el pistoletazo de salida, los ensayos de Rod Davies y Digby Ioane auparán a los Reds a la parte alta de la conferencia australiana, una conferencia bastante buena para proclamarse campeón de la segunda edición de super XV.
lions
Stephan Greeff, Ross Cronje, Jaco Kriel, Hendrik Roodt, CJ van der Linde, Butch James, Wikus van Heerden, Whestley Moolman, Waylon Murray, Warren Whiteley, Patric Cilliers, Michael Rhodes, Michael Bondesio, Martin Bezuidenhout, Lionel Mapoe, Joshua Strauss, Jaco Taute, Elton Jantjies, Bandise Maku, Alwyn Hollenbach, Dylan des Fountain, Jacobie Adriaanse, Cobus Grobbelaar, JC Janse van Rensbur, Doppies la Grange, Derick Minnie, Franco van der Merwe, Deon van Rensburg, James Kamana, Michael Killian
Los Lions son un equipo en alza, han pasado de ser el peor equipo de la liga en 2010 a ser campeones de la Currie Cup en 2011. No es el mismo nivel que la Super XV, pero en ella juegan Sharks, Western Province, Blue Bulls y Free State Cheetahs y para un equipo que no visitaba los playoffs desde 2008, la victoria de 2011 no está nada mal.
John Mitchell ha cambiado definitivamente a este equipo. Después de incontables proyectos de renovación que han pasado por cambiar invariablemente el capitán de turno (Grobelaar, Van der Merwe, La Grangee…) parece que finalmente el equipo se ha asentado y, por primera vez en mucho tiempo, se repite capitán: Josh Strauss.
Tienen estos Lions un equipo que engaña. Es sorprendentemente competitivo si se le da la ocasión. La primera línea, la más floja, a buen seguro sufrirá ante sus más experimentados vecinos, pero con Van der Merwe, van Heerden y el gigantón Roodt la segunda pinta bastante bien. En la tercera, todos dependen de Strauss, un número 8 / blindside flanker que a quien escribe le encanta.
Detrás hay auténticos correcaminos. Con Kamana, Mapoe o el propio Jantjes, quizá les faltan kilos y centímetros, pero no velocidad.
El pie de Jantjes parece que va cogiendo más seguridad lo cuál es importante, pero por si acaso siempre está Butch James, quien sabe un poco de qué va esto.
Para evitar ser otra vez los últimos de Sudáfrica y estar en la cuerda floja ante la inminente llegada de los Kings, han llegado van der Linde, Roodt y los dos Cronje, pero se han ido Kockot y Vermaak. Las luchas con los Cheetahs van a ser apasionantes.
Hurricanes
Jeffery Toomaga-Allen, Beauden Barrett, Tim Bateman, Michael Bent, James Broadhurst, Richard Buckman, Dane Coles, Jason Eaton, Chris Eaton, Reggie Goodes, David Hall, Jayden Hayward, Cory Jane, Daniel Kirkpatrick, Jack Lam, Alapati Leiua, Faifili Levave, Karl Lowe, Motu Matu’u, Ben May, Tristan Moran, Charlie Ngatai, TJ Perenara, Tusi Pisi, Mark Reddish, Julian Savea, Brad Shields, Conrad Smith, Chris Smylie, Andre Taylor, Jeremy Thrush, Victor Vito
Aficionados de los Hurricanes, animáos. Por fin los Hurricanes van a poder explotar todo ese talento que año tras año parece desbordar la región meridional de la isla norte de Nueva Zelanda. En los últimos años, entre las cuatro provincias que forman la franquicia de los Hurricanes han salido más jugadores de primer nivel que en el resto del país: Cruden, Fruean, Guilford, Gear, Mathewson, Ellison, Paterson, Dagg, Hoeata, Waldrom… todos han buscado su oportunidad lejos de Wellington.
Así que, la última hornada de jóvenes talentos: Leiua, Taylor, Perenara, Barrett, Savea… por fin tiene la oportunidad de quedarse en los Hurricanes en lugar de tener que marcharse lejos. Renovación total del equipo, empezando por la primera línea en la que ninguno de los titulares el año pasado figura ya en el equipo. El fichaje de Ben May, importantísimo, puede ser la diferencia entre un set-piece dominado o un set-piece que aguante el tipo. En cualquier caso, urge recambios en la segunda línea o de lo contrario, la plataforma de los Hurricanes será desintegrada por casi cualquiera.
Victor Vito, Levave y Lam/Waldrom serán una buena tercera, mientras que el puesto de 9 puede ser para cualquiera de la pareja Eaton/Perenara. Con Tusi Pisi y la maravilla Bauden Barrett, el 10 estará en manos de un apertura competente, pero si yo fuera Hammett intentaría combinar juventud y experiencia dentro de lo posible, por ejemplo, con Eaton-Barrett. Tim Bateman vuelve a NZ para formar pareja con Conrad Smith, pero es posible que Leiua sirva más a los propósitos de Hammett. De todas formas, Hammett y Bateman se conocen de Christchurch, cuando Deans y Hammett lo usaban de número 12 junto a Casey Laulala.
En el back three, calidad asegurada y ya es hora de exigirle a Andre Taylor que nos demuestre cómo juega un futuro zaguero All Black.
En resumen, mucha calidad atrás, todavía más juventud, y un paquete de delantera que se tiene que curtir. Así que si los Hurricanes llegan al 50% de victorias pueden darse con un canto en los dientes.
Eso sí, sus ensayos pueden ser de antología.
Popularidad 1% [?]View the original article here
Otros Blogs de la red:
No hay comentarios:
Publicar un comentario